martes, 10 de marzo de 2015

La Clase (Entre les Murs)




 María Gutiérrez.

LA CLASE (Entre les Murs)





Director: Laurent Cantet.
Intérpretes: François Bégaudeau (François Marin), Esmeralda Ouertani (Esmeralda), Cherif Bounaïdja Rachedi (Cherif), Louise Grinberg (Louise), Franck Keïta (Souleymane), Juliette Demaille (Juliette), Laura Baquela (Laura), Nassim Amrabt (Nassim), Rachel Regulier (Khoumba), Olivier Dupeyron (Olivier), Wei Huang (Wei), Qifei Huang (Qifei), Henriette Kasaruhanda (Henriette), Agame Malembo-Emene (Agame), Anne Wallimann-Charpentier (Anne), Angélica Sancio (Angélica), Arthur Fogel (Arthur), Boubacar Toure (Boubacar), Burak Özylmaz (Burak), Carl Nanor (Carl), Dalla Doucoure (Dalla), Frédéric Faujas (Frédéric), Yvette Mournetas (Yvette), Vincent Robert (Hervé), Eva Paradiso (Eva), Anne Langlois (Sophie), Patrick Dueruil (Patrick), Burak Özyilmaz (Burak), Dorothée Guilbot (Rachel),  Justine Wu (Justine), Damien Gomes (Damien), Lucie Landrevie (Lucie), Cécile Lagarde (Cécile), Vincent Caire (Vincent), Jean-Michel Simonet (Director del instituto), Adeline Fogel (la madre de Arthur), Khalid Amrabt (el padre de Nassim), Lingfen Huang (la madre de Wei) y  Wenlong Huang (el padre de Wei).
Productor: Haut et Court
Guión: François Bégaudeau, Laurent Cantet y Robin Campillo (basado en la novela “Entre les Murs” de François Bégaudeau).
Fotografía: Pierre Milon.
Sonido: Agnes Ravez, Antoine Baudouin, Antoine Mercier, Jean-Pierre Laforce, Olivier Mauvezin y  Paulin Sagna.
Montaje: Robin Campillo y Stephanie Leger.
Año de producción: 2008
Nacionalidad: Francia

Clase Invisible


La película La Clase (Entre les murs) se basa en el libro del mismo nombre de François Bégaudeau. Este escritor ha publicado sobre sus experiencias como maestro en un colegio que está situado en un barrio conflictivo de Paris. Laurent Cantent adapta el libro en 2008. Bégaudeau interpreta el papel principal del profesor François Marin. Esmeralda Ouertani, Louise Grinberg, y Wei Huang juegan el papel de estudiantes de mismo nombre. Rachel Regulier y Franck Keita son la estudiante Khoumba y el estudiante Souleymane.

La película refleja las dinámicas dentro de las clases, entre alumnos de distintas razas en un año académico completo. En la Francia de la vida real donde entre los temas destaca la creación de la nueva identidad. El tema de nacionalidad tratado en el libro y la película es muy relevante en la sociedad francesa de hoy. En la periferia de Paris, en grandes bloques de apartamentos construidas por el gobierno viven mayoritariamente ciudadanos de ascendencia magrebí e inmigrantes. Hay una cuota alta de desempleo y una alta tasa de criminalidad. Los propios habitantes nombran racismo como problema principal para encontrar trabajo.

Laurent Cantet, cineasta reconocido, se preocupa por temas sociales como en sus anteriores filmes Recursos Humanos y en El Empleo del Tiempo. Más adelante, dirigirá Hacia el sur, una cinta donde Cantet se marcha de su país para trasladarse a Haití. La cámara al hombro o los actores no profesionales son elementos que llaman poderosamente la atención.





La clase trata principalmente con hijos de inmigrantes, llamados inmigrantes de segunda generación en Francia. El término refleja ambigüedad pues se les trata al mismo tiempo como franceses pero también como inmigrantes. Ello crea un conflicto de identidad. En una escena un estudiante marroquí comenta que cuando está jugando un equipo magrebí en la copa de futbol los estudiantes de ahí se consideran africanos. Pero cuando no hay un equipo magrebí de repente son franceses y apoyan el equipo francés. A las diferencias de clase social se suman los cambios aceleradísimos de la globalización, la crisis de la familia, la dificultad de proyectar un futuro y tantas otras problemáticas.


Por otra parte, los diálogos con los alumnos  son frescos e imprevistos, el debate entre maestros pone de manifiesto que  ni siquiera logran coincidir a la hora de elegir un título que sea útil para las asignaturas. Discuten premios y castigos; confirman que la violencia y la apatía crecen; se multiplican los dilemas morales. Los docentes tampoco pueden hacerse cargo de una realidad que los excede, ni es posible trabajar sin mínimas normas de convivencia. Todo es muy complejo. Algunos ya están cansados de la escuela, la mayoría la sobrellevan como pueden. El mundo sigue su curso.


Los adolescentes de los muros

 

Por otra parte, la película también muestra los dos lados diferentes de estos alumnos, el lado que corresponde con los estereotipos que hay sobre estudiantes de su clase social y el lado que desaprueba estos estereotipos. La primera impresión que el espectador capta es que los estudiantes no le tienen respeto a Marin como su profesor y ni a la escuela tampoco. Se ve como usan el móvil en clase y hablan entre sí, no prestando atención. Souleyman por ejemplo también infringe el espacio privado de Marin preguntándole si es homosexual. Khoumba también descuida la posición de autoridad que Marin tiene como profesor cuando se niega a leer. Finalmente, las delegadas de la clase, Louise y Esmeralda rompen la confianza de los profesores cuando les dicen a los estudiantes lo que ha pasado en la reunión de notas.




También hay escenas que manifiestan como los estudiantes han empezado a creer lo que la sociedad francesa piensa de ellos. Cuando Marin les encarga escribir una autobiografía comentan que no tienen nada que decir, que no hay nada interesante en sus vidas. Al final de la película una estudiante va a hablar con el profesor y le expresa que no ha aprendido nada y no piensa que vaya a seguir estudiando cuando tenga la opción de dejarlo. Sin embargo, también hay varias instancias en el filme que señalan que los jóvenes si son distintos. Esmeralda por ejemplo sorprende a Marin cuando revela que ha estado leyendo a Platón en su tiempo libre. Un estudiante que llega nuevo a la clase comenta en su autobiografía que no le gustan las armas, el racismo, y visitar a su hermano en la cárcel. Y aunque exista una estudiante que piensa que no ha aprendido nada la mayoría de los estudiantes le pueden dar varios ejemplos al profesor sobre que han aprendido durante el año en sus clases.
 
Aparte del tema de la nacionalidad y como ese influye a los hijos de inmigrantes, la película también trata sobre la escuela en general, y sobre Marin como profesor en especial, tratan de ayudar a los niños y en cuales aspectos suceden y en cuales fracasan. La escuela en la cual Marin enseña trata de encontrar maneras para ayudar a sus alumnos. En una reunión, por ejemplo, hay un debate sobre si castigar a los alumnos, a través de puntos de penalización, si sería efectivo o si deberían valorar su esfuerzos para motivarlos mejor. También tratan de eliminar la división entre alumnos y profesores con la intención de crear un ambiente donde los estudiantes confíen más en los profesores y no los vean como enemigos. Sin embargo, la escuela también tiene sus fallos. La discusión en la que se debate el tema sobre cómo trabajar mejor con los estudiantes se termina sin resolución porque el director no tienen tiempo.

Marin es el que más seguimos durante la película, viendo sus triunfos y fracasos. Se percibe que al profesor le importan sus estudiantes, por ejemplo tratando de averiguar que le ha pasado a Khoumba durante el verano que la ha cambiado tanto. Cuando Souleyman lucha con escribir su autobiografía, Marin le anima a contar su historia a través de fotos. En general, aunque tiene muchas confrontaciones con Souleyman, igual lo defiende en la reunión de notas y trata de convencer a los otros profesores que no debe ser expulsado. Pero a pesar de todos sus esfuerzos el maestro no siempre tiene éxito. Khmouba le critica, acusándole de no tratar a sus alumnos con respeto y provocándolos. Marin además también tiene un momento de desesperación cuando les dice a sus alumnos que no le importa, que se queden en los barios de donde vienen. 



    

            Analizando el aspecto técnico de la película, es claramente visible que aunque es un drama de ficción, está realizado de forma que le da la apariencia de ser documental. La falta de música y de efectos especiales subraya esta noción. La película esta filmada en mayoridad en primer plano, fijando se mucho en las acciones y reacciones de los alumnos durante clase. La película se basa solo en un aspecto de las vidas de los estudiantes, de su tiempo en la escuela. El nombre de la película en francés Entre les murs apoya esto mismo. La película no muestra el resto de los aspectos que influyen la vida de los estudiantes, su vida en casa, en su tiempo libre, etc. De este modo la película sigue la perspectiva de Marin, mostrando solo lo que él ve y sabe de la vida de sus estudiantes.


            En conclusión, La clase expone las dificultades que tienen los hijos de inmigrantes en encontrar su identidad, revelando como en ciertas maneras soportan los estereotipos que hay sobre ellos, pero también como los refutan. Esta obra de Laurent Cantet también analiza como en las escuelas de estos barios conflictivos navegan estos estudiantes.
Si bien es verdad que el rechazo por parte de adultos hacia los malos modales y la falta de educación de los jóvenes es un gesto casi tan antiguo como la enseñanza (el mismísimo Sócrates se quejaba de que los jóvenes de su coetáneos que  contradecían a sus padres y le faltaban al respeto a sus maestros), es cierto que, en la actualidad, la conducta de los jóvenes se ha visto empeorada como consecuencia de la difícil situación social en la que nos encontramos. Por poner un ejemplo, la manera en la que los alumnos del film se enfrentan en discusiones sobre sus países de origen (Mali, Marruecos o Haití) no dista demasiado de los problemas de convivencia que se dan entre las distintas minorías que tratan de integrarse en grandes capitales como París. Estos y otros problemas estallan, por tanto, entre los muros del instituto,  los profesores poco pueden hacer: en ese sentido, la escena en la que la madre del joven Souleyman habla en una lengua que los profesores no entienden es significativa por la manera en la que se manifiesta la impotencia de estos últimos. Al final, Cantet introduce un apunte no por poco probable menos excelente: el de todos los alumnos unidos contra el profesor en defensa de un objetivo común, contienda que termina suavizándose con el partido de fútbol que alumnos y profesores juegan al final del curso.
            
 


María Gutiérrez